En Vos Estrello Autos

http://demasiadoespedir.blogspot.com.ar/2016/05/carta-mi-padre-1.html

Todo lo malo que hay en mi..sos vos, si pudiera matarte, si mi corazón me lo permitiese, estarías bajo tierra en algún descampado. No es que no me haga cargo de quien soy, solo que soy cociente de las consecuencias de tus errores, osea..yo. Ojala alguien me pegue un tiro pronto, para robarme las zapatillas...o algo así, ojala tu sangre muera conmigo para siempre.

todo pasa tan rápido y yo avanzo tan lento

Las flores ya no florecen y la casa se cae a pedazos y te extraño. Abuelo Quiero que vuelvas y me enseñes a trabajar de nuevo. Quiero que vuelvas aunque sea para cometer los mismos errores. Quiero escuchar tus palabras con mi mente de ahora. Quiero entenderte y escucharte de nuevo. Abuelo Las flores no crecen y la casa se cae a pedazos. Quiero que vuelvas, me enseñes sobre la voluntad y tantas cosas por preguntar.

Yo

Todos somos presos de nuestros propios  demonios y fantasmas, en mi..toman forma de preguntas. Me atrevo a decir que estas son del tipo más efectivo a la hora de generar angustias irresolubles al que un ser humano puede enfrentarse, ya que las preguntas  lo único que buscan son respuestas y las respuestas para el hombre, son algo inalcanzable. Desde hace mucho tiempo  he creído ser alguien enfrente de algo: *Un día, un niño dando algunos de sus primeros pasos, tratando de llegar a una pared cubierta por una humilde madera blanca, siendo alzado y alejado de ella por alguna tía inoportuna, como un anuncio de que toda mi vida iba a ser una recurrencia a ese hecho tan tan lejano como originario y de color gris. *Una tarde pero ya muchos años después, yo, el mismo niño, enfrente de su viejo hogar ya deshabitado, donde la inexistencia de una conexión eléctrica y una tarde nublada con un avecina miento de tormenta proporcionaría la espesa oscuridad que aterraría a mi padre, quien iba a mandar a su hijo a respirar hondo, adentrarse en la casilla de madera, en la oscuridad, confiar en la lógica sistemática que le susurra todos los días (aun siendo un niño) que no existe magia alguna en este mundo que le pueda proporcionar felicidad, angustia o salvación, enfrentarse al miedo de lo que no se puede ver, tomar el pedazo de lo que sea que su padre no se animaba a tomar, emerger con una valentía y una voluntad que ya nunca se iba a repetir en su cuerpo,  como si se tratase de una sustancia física que tendría fin, siendo esa la tarde en la que se agotó, entregar lo pedido y salir ileso. *Me recuerdo enfrente de mis primos, luchando por ser aceptado y que se me permitiese el don de jugar con ellos, a la pelota o a lo que sea. Simplemente me recuerdo siendo humillado y engañado. *Me veo, cada vez que hoy por hoy trato de conectar socialmente con algún alma que se apiade de un pibe que no quiere estar solo, de alguien que quiere compartir su visión del mundo, compartir la felicidad, me veo pero no soy yo, por lo menos no el de ahora. A veces soy ese joven que creía que lo que era estaba mal, que ser lo que era no era lo correcto, que así como era no podía ser digno de la palabra, de la confianza, o del simple respeto de sus compañeros y compañeras de aula. Me veo enfrente de ellos y ellas, vendiendo mi yo por un puñado de miradas, por una aceptación que se diluía cada vez que se sentían aburridos, o querían sentirse poderosos o simplemente recordarme que siempre iban a ser mejores que yo. He escuchado que los niños no tienen maldad, no recuerdo que sea así. A veces pienso que el colegio a asesinado mas corazones de los que ha instruido. *Una tarde, enfrente de una decisión, ella o ellos. Ella, a quien iba a atormentar con mi amor. *Un año y medio entero, enfrente de mí mismo, luchando contra mi amor. *Una vida entera, enfrente de mi pecho, que me pide a gritos erupcionar. *Me veo una víspera de navidad en frente de mi madre, recordándome que mi valentía se agoto en aquella casilla. Que no estaba haciendo lo que un hijo varón debía, matar a su padre. *Una noche, otra noche de esas noches por las que pasábamos con la mujer más bella que he visto, sufriendo por no entendernos..me recuerdo enfrentándome a mi propia ira, conteniendo el yo que no conocía, el que no quise conocer, el que pensé no existía. *Una madrugada, enfrente de una mujer siendo robada, arrastrada. Hace unos años me encuentro nuevamente enfrente de algo, pero esta vez mucho mas complejo y constante: Una sucesión de preguntas sin respuesta que lo único que hacen es mantenerme quieto en el mismo lugar como si de mis manos colgasen dos adoquines. Demonios que me atormentan cuando trato de irme a dormir o cuando trato de zambullirme en mi propio camino. Fantasmas que me dicen que no soy, que si soy no soy nada, no soy nadie y que no puedo, que nunca voy a poder.

Cuatro y cuarenta y cuatro de la madrugada

He puesto en duda hasta las más básicas de mis contradicciones, ingrávidamente me muevo (o eso pienso) a través de columnas que por resta lógica ya no existen o talvez nunca existieron. Floto en un mundo donde hasta la propia duda esta puesta en duda, por lo tanto nada es posible y nada es imposible. Por lo tanto... ciego. Por lo tanto todo y nada carece de relevancia aunque infinitamente la posea. Por lo tanto ya jamás importó. Por lo tanto el espeso cilindro en la boca de mi estómago se hunde más y más (o eso pienso) y lo confundo con hambre; y el hambre la confundo conmigo mismo Y entonces olvido quien soy y solo soy, o soy también, o simplemente no soy: El vacío que queda después de ya jamás saciar mi hambre ya jamás saciar[me] a mí mismo. O la ausencia del intento de la proyección del deseo de la materialización del cilindro como insatisfactorios murmullos a las 4 y 44 de la madrugadaPretendiendo ser y no ser al mismo tiempo nada Pretendiendo no ser y ser al mismo tiempo palabras.Palabras que traten de llegar a donde todos temen llegar a donde nadie se toma el tiempo de llegar He puesto en duda hasta la más básica de mis palabras ingrávidamente me sostengo (o eso pienso) con columnas que por suma lógica ya no existen o talvez nunca existieron.

La noche susurrando un viento fresco

el aire huele a que mi padre aun esta vivo

pero él no lo está

Ya no golpeara mi ventana para decirme adiós

tampoco volverá a besar mi frente de nuevo

Después de todo

soy sólo yo

susurrándome al oido

Ya está lo decidi para tu cumpleaños te voy a regalar un mundo,compre unas pequeñas islas de color verde fluor unos mares magentas con cielo verde pastel,ya está para tu cumpleaños lo envuelvo todo,le ponemos una etiqueta que dice fragil pero ambos sabemos que es mucho mas fuerte que nosotros.